Introducción
Aunque la mayoría de las enfermedades cardiovasculares se presentan en países con ingresos medios o bajos, se sabe poco sobre el uso de medicamentos eficaces en el campo de la prevención secundaria en estas comunidades.
Objetivo del estudio
El objetivo fue evaluar el uso de fármacos que han demostrado ser eficaces en prevención secundaria [antiagregantes, beta bloqueantes, inhibidores de la enzima de conversión de la angiotensina (IECA) o antagonistas del receptor de angiotensina (ARA-II) y las estatinas] en pacientes con antecedentes de enfermedad coronaria o un accidente cerebrovascular .
Material y métodos
En el estudio PURE (Prospective Urban Rural Epidemiological) se reclutaron personas de 35 a 70 años a partir de las comunidades rurales y urbanas de países en distintas etapas de desarrollo económico. Se evaluaron las tasas de enfermedad cardiovascular (enfermedad coronaria o accidente cerebrovascular) y el uso de fármacos de probada eficacia en prevención secundaria mediante cuestionarios estandarizados, entrevistas telefónicas, visitas a los hogares o entrevistas a los pacientes.
Resultados
Se incluyeron 153996 adultos de 628 comunidades urbanas y rurales de los países con ingresos clasificados como de alto (tres países), medio-alto (siete), medio-bajo (tres), o bajo (cuatro) entre enero de 2003, y diciembre, 2009. Un total de 5650 participantes autoreportaron haber padecido algún evento como consecuencia de tener enfermedad coronaria y 2.292 un accidente cerebrovascular. Unos pocos individuos con enfermedad cardiovascular tomaban antiagregantes plaquetarios (25,3%), beta bloqueantes (17,4%), inhibidores de la ECA o de ARA II (19,5%) o estatinas (14,6%)
El uso fue mayor en los países de altos ingresos (tabla 1): antiagregantes 62%, beta bloqueantes 40%, inhibidores de la ECA o ARA II 49,8% y estatinas 66,5%) y menor en países de bajos ingresos (8,8 %, 9,7%, 5,2% y 3,3%, respectivamente), y disminuyó acorde a la reducción de la condición económica del país (p tendencia <0,0001 para cada tipo de fármaco). Un bajo número de pacientes no recibieron medicamentos en países con altos ingresos (11,2%), en comparación con el 45,1% de países de renta media-alta, el 69,3% con renta media baja, y el 80,2% de países con bajos ingresos.
Tabla 1: Consumo de fármacos en relación a los ingresos económicos del país de residencia.
El consumo de fármacos es mayor en áreas urbanas que rurales (tabla 2, fármacos antiplaquetarios 28,7% vs 21,3%; beta bloqueantes 23,5% vs 15,6%, inhibidores de la ECA o ARA II 22,8% vs 15,5% y estatinas 19,9% vs 11,6%; todos p <0,0001), con mayor variación en los países más pobres (p interacción <0,0001).
Tabla 2: Consumo de fármacos según el lugar de residencia del paciente (urbano vs rural).
Un hallazgo importante de este estudio es que los factores relacionados con el país (por ejemplo, la situación económica) afectan más al consumo de fármacos que los factores individuales (por ejemplo, la edad, el sexo, la educación, el tabaquismo, índice de masa corporal, hipertensión arterial y diabetes).
Conclusiones
El uso de medicamentos en prevención secundaria es bajo en todo el mundo, especialmente en países de bajos ingresos y zonas rurales. Son necesarios enfoques sistemáticos para mejorar el uso a largo plazo de este tipo de medicamentos que son básicos, baratos y con eficacia probada.