En los últimos años, la angioplastia primaria se ha consolidado como la terapia de reperfusión de elección en el SCACEST, con lo cual se ha ido incrementando el número de procedimientos que se realizan, especialmente fuera del horario laboral habitual. Paralelamente, ha surgido una gran controversia sobre la relación entre el momento de realización y la mortalidad.
Se compararon los resultados de las angioplastias primarias realizadas fuera de horario laboral (OFF-hours) con las realizadas en horario laboral (ON-hours) en pacientes con SCACEST. Los resultados evidenciaron que el 75% de las ACTP se realizaron OFF-hours, con una tasa de éxito del 95%, equiparable al de las ACTP realizadas ON-hours, y con un retraso en el tiempo de total de isquemia de aproximadamente 10 minutos mayor en las angioplastias realizadas fuera de horario laboral. Las ACTP OFF-hours no se asociaron a mayor mortalidad, ni a los 30 días, ni a un año, ni a lo largo de todo el período de seguimiento, ni tampoco a mayor riesgo de otros eventos (reinfarto, nueva revascularización de vaso tratado o trombosis del stent).
Según cuenta el Dr. José María Larrañaga, residente de cuarto año de Cardiología del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, "el riesgo de tiempos de reperfusión prolongados en las angioplastias primarias realizadas fuera de horario laboral tiene un origen multifactorial: por un lado, los pacientes que sufren el infarto en horario nocturno pueden no identificar correctamente los síntomas y decidir esperar hasta la mañana siguiente. Por otro lado, los recursos humanos fuera del horario laboral son más limitados, lo que choca con la necesidad de actuar en estrechos márgenes de tiempo, trabajando a contrarreloj para realizar la angioplastia primaria en el menor tiempo posible. Para ello, debe haber una buena red de transporte interhospitalario en ambulancia o helicóptero, y es fundamental que el hemodinamista y la enfermería se desplacen al centro en un tiempo óptimo, y que sea un equipo autónomo capaz de enfrentarse a casos de angioplastias complejas y tomar decisiones en poco tiempo. Eso evidencia la necesidad, por una parte, de educar a la población sobre las patologías coronarias, y por otra, de tener un sistema organizado de manera eficiente".
El éxito por igual de las angioplastias primarias, independientemente del horario en el que se hayan realizado, depende en gran medida de la existencia de redes de atención integral al infarto en las distintas comunidades autónomas, como es el PROGRALIAM dentro de Galicia, "un programa bien organizado, con un protocolo que facilita la coordinación entre los profesionales integrados dentro de la red, y que ayuda a optimizar la calidad asistencial al infarto con elevación de ST. Este programa, activo desde 2005, ha sido esencial en la mejoría de los resultados procedimentales y por este motivo, toda área sanitaria debe tener un programa similar, tal y como lo soportan las guías de práctica clínica actuales", puntualiza el Dr. Larrañaga. La implantación del Código Infarto en las Unidades de Hemodinámica han permitido hablar de notables mejoras, tanto en las intervenciones de angioplastia primaria, como en el tiempo de recuperación del paciente. Un estudio recientemente publicado en Revista Española de Cardiología compara los resultados obtenidos en pacientes intervenidos mediante Código Infarto (en términos de manejo clínico, revascularización y mortalidad) con los resultados de pacientes intervenidos dos años antes de su implantación. La reducción de un día de media en el tiempo de estancia hospitalaria y la menor mortalidad hospitalaria de los pacientes de algo riesgo ponen de manifiesto la necesidad de contar con estos programas en los hospitales españoles.