La supervivencia de los pacientes con insuficiencia cardiaca (IC) crónica ha mejorado en las ultimas dos décadas. Varios ensayos clínicos han demostrado de forma muy consistente el beneficio del tratamiento médico con antagonistas del sistema renina-angiotensina-aldosterona y betabloqueantes (BB), por lo que su uso queda recogido en las guías de práctica clínica (GPC) y la implementación de dichas GPC mejora los resultados clínicos. No obstante, es conocido que la implementación de las GPC es subóptimo.
La mejor información disponible para conocer cómo se trata la IC en Europa proviene de los datos publicados del Registro Europeo de Insuficiencia Cardiaca (ESC Heart Failure Long-Term Registry), estudio prospectivo observacional realizado en 211 servicios de cardiología de 21 países europeos o mediterráneos. Los centros fueron seleccionados por las sociedades de cardiología de cada país y para maximizar la representatividad se tuvo en cuenta los tres niveles de complejidad de los servicios de cardiología, así como los habitantes de cada país.
El tratamiento farmacológico en pacientes con IC crónica (ambulatorios) con fracción de eyección reducida el uso de IECAs/ARA2, BB y de antagonistas del receptor minerolocorticoide fue respectivamente de 92,2%, 92,7% y 67% respectivamente. Cuando se consideraron las razones para no-adherencia, la tasa real de infratratamiento fue de 3,2, 2,3 y 5,4% respectivamente. Alrededor del 30% recibían la dosis óptima de los tres fármacos, sin embargo, existía una razón documentada para no alcanzar la dosis objetivo en dos tercios de los pacientes. Se puede concluir de este registro que, en Europa, la mayoría de los pacientes de IC con FE reducida, reciben los fármacos recomendados en las GPC, aunque con frecuencia no alcanzan la dosis óptima. Aunque la publicación de este registro analiza los datos globales o agrupados los países en 6 en áreas geográficas, también permite analizar cada país o cada centro. Entre las limitaciones de este registro está que solo incluye a una parte de los pacientes con IC, aquellos que son atendidos por cardiólogos y no consideran aquellos atendidos en otras unidades como medicina interna o servicios de urgencias.
Entre las buenas noticias está la incorporación reciente de un nuevo fármaco, el sacubitrilo/valsartan (Entresto®), para pacientes con IC y fracción de eyección reducida que persisten sintomáticos a pesar del tratamiento estándar (IECAs/ARA2, BB y ARM). Se trata de un cambio en el paradigma en el que en vez de utilizar solo fármacos que bloquean el sistema neurohormonal que empeora la IC, se añade el favorecer mecanismos beneficiosos. Este nuevo fármaco tiene una acción dual. Por una parte, el valsartan inhibe el SRAA con los efectos ya conocidos desde hace muchos años (es un ARA2), y por otra, sacubitril, inhibe la neprilisina (enzima que degrada los péptidos natriureticos). De esta forma aumentan las concentraciones de péptidos natriuréticos, con sus potenciales beneficios fisiopatológicos en la IC. Ha demostrado reducir la mortalidad y las hospitalizaciones y mejorar la calidad de vida.