Los autores presentan su experiencia en la implantación femoral de marcapasos en aquellos casos en que el acceso venoso superior no es viable, utilizando la técnica de Ellestad modificada.
Se describe el protocolo minuciosamente. Son 50 casos llevados a cabo desde Junio 2001 a Junio 2011, de los que pudieron seguirse 46, lo cual representa el 1.9% de todos los implantes de MP en su centro. La edad media fue 76 años, siendo varones el 61%. La mayoría de los pacientes presentaron bloqueo A-V avanzado con función sinusal normal, y ocho pacientes se hallaban en fibrilación auricular, tres pacientes se hallaban en severa disfunción ventricular izda. El 40% de todos ellos fueron anticoagulados en el periodo pos implante. El tiempo medio de escopia fue 6.7 minutos. Los modos de estimulación fueron VVIR (24), DDDR (21), Biventricular (3), VVT (1) y AAIR (1). El seguimiento medio fue de 50 meses, y durante el mismo no se observaron incidencias como muerte, sepsis, trombosis, fracturas o desplazamiento de cable, o complicaciones severas relacionadas con el procedimiento. No obstante en 5 pacientes hubo que retirar el sistema por erosión o infección. Un paciente hubo de reimplantar un electrodo por umbrales de estimulación muy elevados sin apreciar dislocación del cable. Hubo 21 muertes, ninguna relacionada a la técnica femoral. La ausencia de dislocación (solo 1 caso) lo atribuyen a la utilización de cables de fijación activa y la pared libre auricular derecha en lugar de la orejuela.
Los autores concluyen que la implantación de MP por este acceso, cuando existe imposibilidad de utilizar las vías venosas altas, no es dificultoso para el profesional experimentado, y tiene la ventaja, en estos casos de evitar la vía epicárdica. El pronóstico es similar al de los accesos venosos superiores.
Comentario
El Dr García Guerrero nos presenta su amplia experiencia, la más larga, en adultos, descrita en la literatura. En la actualidad, 2017, la aparición de MP “sin cables” reducen la indicación de este procedimiento (pues la indicación VVIR fue en el 48% de los casos); no obstante no resta mérito al procedimiento utilizado por este gran profesional en otros momentos tecnológicos.
Autores
García Guerrero JJ, Fernández de la Concha Castañeda J, Doblado Calatrava M, et al.
Revista
Pacing Clin Electrophysiol 2017; 40: 638-643. DOI: 10.1111/pace.13082