Los avances en el cribado, diagnóstico precoz y tratamiento del cáncer de las últimas décadas han mejorado de forma notable las tasas de supervivencia al cáncer. Como resultado, existe una conciencia cada vez mayor de los efectos adversos que los tratamientos antitumorales pueden ocasionar en el sistema cardiovascular (CV).
Muchos pacientes se encuentran confusos cuando llegan por primera vez a la consulta de cardio-oncología. Aunque oncólogos y hematólogos les hayan explicado por qué les derivan al cardiólogo, la información puede ser difícil de asimilar cuando se han recibido tantas malas noticias en tan poco tiempo.