La cuarta edición de resultados del proyecto RECALCAR, correspondiente a datos de 2013/2014, muestra importantes diferencias en la asistencia al paciente cardiológico crítico. Como ejemplos, un 34% de Unidades del Área del Corazón (UAC) con más de 24 camas no tienen asignada guardia de presencia física, y un 41% de UAC con 1.500 o más ingresos/año (que se corresponden aproximadamente con el de un área de 300.000 habitantes) no tienen una unidad de cuidados críticos dependiente de ella.
Ante las conclusiones de este informe dirigido a mejorar la calidad de la asistencia cardiológica en nuestro país, así como a aumentar la eficiencia en los servicios y unidades de cardiología del Sistema Nacional de Salud (SNS), el Dr. José Ramón González-Juanatey, presidente de la SEC, comenta que, "las diferencias en los indicadores de resultados en la atención de pacientes con cardiopatías nos deben orientar para poner en marcha políticas a nivel local y estatal para lograr mayor homogeneidad".
Uno de los retos que la cardiología española tiene por delante es el manejo del paciente agudo, ya que RECALCAR revela que las unidades de pacientes con patologías cardiológicas críticas en muchos hospitales de España están fuera de la organización y de la dependencia de los Servicios de Cardiología. “Al menos en los centros de segundo y tercer nivel, la recomendación de la SEC es que en hospitales con un área mayor de 300.000 habitantes debe haber un área de críticos cardiológicos bajo la responsabilidad directa de los cardiólogos, y en los demás hospitales los cardiólogos deben participar de alguna forma en la organización de la atención estos pacientes”, puntualiza el presidente de la SEC, ensalzando así el contraste entre los resultados de la situación actual que refleja RECALCAR, y el indicador centinela que marca el documento de consenso INCARDIO, también presentado en este congreso, para mejorar la calidad de la atención cardiológica.
De ahí que uno de los retos en cardiología más importantes para el futuro inmediato de nuestro país sea evitar riesgos potenciales de malas prácticas, como son la ausencia de guardias de presencia física en unidades con más de 1.500 ingresos y/o procedimientos complejos, o la actividad de hemodinámica y cirugía cardiovascular en centros sin camas asignadas a cardiología.
RECALCAR pone de manifiesto que un 56% de los episodios de ingreso hospitalario con diagnóstico de alta de enfermedad del área del corazón se realizan por servicios distintos al de cardiología. Los datos disponibles indican que la mortalidad intrahospitalaria de los pacientes con infarto dados de alta por un servicio de cardiología es menor.
Cataluña logra los mejores resultados en mortalidad intrahospitalaria del IAM
Uno de los principales indicadores que durante los últimos años ha medido el programa RECALCAR es la tasa de mortalidad intrahospitalaria ajustada por riesgo (RAMER IAM), y cabe destacar que se ha mantenido el promedio en España, que fue del 7,31% en 2012 y del 7,30% en 2013. La comunidad autónoma que presenta la menor mortalidad es Cataluña, con un 5,90%, y la segunda con mejores resultados en cuanto a mortalidad en el infarto es Baleares, con un 6,20%. "Cataluña logra estos resultados gracias a su Código Infarto, que es un modelo de referencia, y Baleares, a pesar de la insularidad, cuenta con un programa de atención al infarto de miocardio regional y eso se refleja en que la mortalidad por infarto es de las mejores de España", valora el presidente de la SEC.
En cualquier caso, la tendencia ha sido positiva para la mayoría de las regiones, y entre las que más han reducido la mortalidad por infarto en un año, destacan Comunidad Valenciana (de 8,49% en 2012 a 7,90% en 2013) y Castilla La Mancha (de 7,26% a 6,80%).
Ahora bien, se debe tener en cuenta que, en 2013, ha aumentado notablemente el número de Comunidades Autónomas que han puesto en marcha sus respectivos “códigos infarto”. En la actualidad estas Comunidades Autónomas son: Aragón, Asturias, Canarias (para el 25% de la población), Cantabria, Castilla la Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, Islas Baleares (para el 75% de la población), Madrid, Murcia, Navarra y País Vasco.
En este sentido, otro de los objetivos que se desprenden de RECALCAR es que la estrategia de cardiopatía isquémica en el SNS y los Servicios de Salud de las Comunidades Autónomas deben impulsar el desarrollo de sistemas integrales que aumenten la ICP-p en las CCAA con tasas más bajas, ya que la situación actual genera importantes inequidades interterritoriales en el acceso para los pacientes con IAM.
Por otro lado, las diferencias entre CC.AA. para la mortalidad ajustada en el conjunto de enfermedades del área del corazón posicionan a País Vasco y Madrid como las que obtienen mejores resultados.