La estenosis aórtica es la patología valvular más prevalente y su tratamiento pasa por el recambio valvular aórtico, ya sea quirúrgico o percutáneo. Una de las complicaciones, potencialmente letal, es la aparición de endocarditis, cuya incidencia se estima hasta 100 veces superior respecto a su aparición sobre válvula nativa1.