¿De qué se trata?
Artículo en el que se evalúa la utilidad de la N-acetilcisteína para prevenir la nefropatía en pacientes con infarto agudo de miocardio, sometidos a angioplastia primaria y en los que se utiliza un volumen moderado de contraste.
J Am Coll Cardiol, 2010; 55:2201–9
En diversos estudios se ha comprobado que la utilización de dosis elevadas de N-acetilcisteína reduce la incidencia de nefropatía inducida por contraste en pacientes en los que se utilizan volúmenes elevados de contraste. Del mismo modo, en modelos animales se ha visto que reduce las lesiones por reperfusión. Con estos antecedentes, los autores se plantean en el estudio LIPSIA-N-ACC, publicado en JACC, la posibilidad de que N-acetilcisteína sea de utilidad en pacientes con infarto agudo de miocardio, sometidos a angioplastia primaria y en los que se utiliza un volumen moderado de contraste.
Los pacientes fueron aleatorizados a tomar altas dosis de N-acetilcisteína (bolo intravenoso de 1.200 mg antes del cateterismo y posteriormente 1.200 mg/12 h durante 48 h, n = 126) o placebo (n = 125), junto con hidratación óptima (1 ml/Kg/h de NaCl 0,9% durante 12 h). Los objetivos primarios de valoración fueron la nefropatía por contraste, definida como el aumento de >25% en la concentración de creatinina <72 h="" despu="" s="" de="" la="" aleatorizaci="" n="" y="" una="" reducci="" lesi="" por="" reperfusi="" medida="" mediante="" resonancia="" magn="" tica="" se="" utiliz="" un="" agente="" contraste="" isoosmolar="" con="" volumen="" promedio="" 180="" ml="" 140="" a="" 230="" en="" el="" grupo="" n-acetilciste="" na="" 160="" 120="" 220="" placebo="" p="0,28).</p" aparici="" nefropat="" objetiv="" 14="" los="" pacientes="" 20="" del="">
Tampoco se encontraron diferencias respecto a la aparición de daño por reperfusión (índice de miocardio recuperado 43,5 vs. 51,5 p = 0,36). Sí que se encontraron diferencias en la aparición de derivados oxidados de las proteínas y LDL oxidada como marcadores de estrés oxidativo, reduciéndose en un 20% en el grupo N-acetilcisteína, sin cambios en el grupo placebo (p <0,05).
Comentarios
Cuando indicamos a un paciente la realización de un cateterismo cardiaco nos preocupa el posible deterioro de su función renal por el contraste utilizado. Entre los principales factores asociados con un mayor riesgo de insuficiencia renal se encuentran el deterioro de la perfusión sistémica, la utilización de gran volumen de contraste y la incapacidad o no realización de profilaxis adecuada. Una buena hidratación en combinación con altas dosis de N-acetilcisteína ha demostrado ser eficaz en la prevención de la insuficiencia renal cuando se utiliza un volumen elevado de contraste. En el estudio actual, con un volumen menor de contraste utilizado y dosis elevadas de N-acetilcisteína, no se consiguen encontrar diferencias frente a placebo. Una explicación puede ser el pequeño tamaño de la muestra, ya que a pesar de que las diferencias no son significativas, sí que se observa una reducción del 6% en la incidencia de nefropatía por contraste. Lamentablemente, todos los estudios realizados hasta el momento sufren de las mismas limitaciones, lo que nos impide obtener una conclusión definitiva sobre la conveniencia de utilizar N-acetilcisteína para la prevención de la nefropatía por contraste.
Referencia
- Holger Thiele, Lysann Hildebrand, Carmen Schirdewahn, Ingo Eitel, Volker Adams, Georg Fuernau, Sandra Erbs, Axel Linke, Klaus-Werner Diederich, Marek Nowak, Steffen Desch, Matthias Gutberlet, Gerhard Schuler
- J Am Coll Cardiol, 2010; 55:2201–9