Un infarto agudo de miocardio se define como muerte de miocardiocitos debido a isquemia celular prolongada. La determinación de troponinas en sangre es el método bioquímico más sensible y específico para llegar a este diagnóstico. La aparición de los nuevos métodos ultrasensibles ha mejorado todavía aún más sus capacidades diagnósticas.
Sin embargo, aunque una elevación anormal de troponina (T o I) se relaciona con lesión miocárdica, no siempre indica la causa precisa.
La estructura del artículo comienza mencionando la recientemente publicada clasificación clínica internacional de los infartos, que resumidamente los divide en 5 tipos.
- Tipo I: Infarto clásico, por un evento coronario primario.
- Tipo II: Secundarios a anemia, embolias, taquicardia, hipoxia, etc.
- Tipo III: Muerte súbita, con indicios clínicos, ECG o anatomopatológicos de isquemia.
- Tipo IV: Asociado a intervencionismo coronario percutáneo o trombosis de stent documentada.
- Tipo V: Aquellos secundarios a revascularización quirúrgica.
Posteriormente, dedica unos apartados a tratar el tema de dónde poner el punto de corte de troponina T o I, algo difícil teniendo en cuenta la cada vez mayor sensibilidad de las pruebas bioquímicas. Para esto, aunque discutible, se considera en muchas ocasiones un percentil 99.
Después desarrollan diversas patologías, que con cierta frecuencia asocian elevación de troponinas, en distintas cuantías y muchas veces de significado incierto. Las situaciones, para las que los autores hacen una breve revisión bibliográfica, para aquellos interesados, son:
- Insuficiencia renal.
- Taquicardias.
- Insuficiencia cardiaca aguda.
- Mio y pericarditis.
- Tromboembolismo pulmonar agudo.
- Síndrome de Takotsubo.
- Sepsis.
- Ictus
- Ejercicio extenuante.
- Contusión cardiaca.
Comentario
El presente artículo de revisión trata un tema de candente actualidad: patologías en las que se elevan las troponinas pero no suponen un infarto al uso (ni precisan un tratamiento como tal). Es de suponer que esta situación, con el incremento tan importante en la sensibilidad de los test bioquímicos, sea algo cada vez más frecuente.
En los últimos años también se ha producido una dramática disminución del diagnóstico de angina inestable a favor del síndrome coronario agudo sin elevación del ST-infarto sin q. Estas mejoras analíticas seguramente han favorecido mucho un diagnóstico precoz de la enfermedad coronaria aguda y probablemente han conducido a un manejo, junto al cambio de mentalidad en las guías al uso, cada vez más agresivo.
No obstante, a la vista de los datos presentados en este artículo y de la enorme frecuencia en la que se objetiva elevación de biomarcadores en ciertas enfermedades (ej. sepsis hasta el 85%) conviene hacer un llamamiento a la prudencia para emplear las pruebas de forma adecuada, en los pacientes en los que está indicado y sin perder nunca el horizonte clínico de vista.
Referencia
Troponin Elevation in Coronary vs. Non-Coronary Disease
- Agewall S, Giannitsis E, Jernberg T, y Katus H.
- Eur Heart J. 2011; 32(4):404-411.