¿De qué se trata?
Artículo en el que se analizan los determinantes de la progresión de las placas de aterosclerosis en pacientes en los que se han alcanzado niveles bajos de colesterol LDL.
J Am Coll Cardiol, 2010; 55:2736-2742
A pesar de alcanzar niveles muy bajos de LDL, muchos pacientes continúan demostrando progresión de la enfermedad y aparición de eventos clínicos. El objetivo de este estudio fue caracterizar los determinantes de dicha progresión, a pesar de haberse alcanzado unos niveles muy bajos de LDL. Para ello se seleccionaron un total de 3.437 pacientes con enfermedad coronaria, incluidos en 7 ensayos clínicos en los que por protocolo se realizaba un estudio ecográfico de la placa de ateroma (IVUS) de forma seriada (CAMELOT, REVERSAL, ACTIVATE, ASTEROID, ILLUSTRATE, PERISCOPE y STRADIVARIUS). Los pacientes que lograron un nivel de LDL ≤ 70 mg/dl (n = 951) fueron a su vez divididos en función de que presentaran una progresión de la placa de ateroma (incremento en >5% en el volumen de ateroma) (n = 200) o no (n = 751). No hubo diferencias demográficas entre ambos grupos. En el grupo de pacientes con progresión de placa se encontraron niveles basales superiores de glucemia (117,1 ± 42,5 mg/dl vs. 112,1 ± 40,0 mg/dl; p = 0,02) y triglicéridos (157,5 mg/dl vs. 133,0 m/dl; p = 0,004), y una menor reducción de apolipoproteína B en el seguimiento (-25,1 ± 3,4 mg/dl vs. -27,4 ± 3,35 mg/dl; p = 0,01). Tras un análisis multivariado, los factores asociados de forma independiente a la progresión de placa en pacientes con LDL ≤ 70 mg/dl fueron el volumen porcentual de placa de ateroma a nivel basal (p = 0,001), la diabetes mellitus (p = 0,02), el aumento de la presión arterial sistólica (p = 0,001), un menor aumento en el colesterol HDL (p = 0,01), y una menor disminución de los niveles de apolipoproteína B (p = 0,001). Los cambios en los niveles de PCR o LDL en el seguimiento no fueron predictores de la progresión de placa.
Comentarios
La introducción del tratamiento con estatinas supuso un importante avance en el tratamiento del paciente coronario. La reducción de los niveles de LDL se asocia a una importante reducción de los eventos coronarios y una estabilización de las placas de ateroma; sin embargo, a pesar de todo, siguen apareciendo eventos cardiovasculares en pacientes tratados, incluso con niveles bajos de colesterol LDL. Los resultados actuales muestran que a pesar de alcanzar niveles muy bajos de LDL con el tratamiento, más de un 20% de pacientes continúan experimentando una progresión de sus placas de ateroma. Como principales responsables de este riesgo residual se han identificado la diabetes, la hipertensión arterial, el colesterol HDL y los niveles de apoB. Estos datos son importantes, ya que se demuestra que el riesgo residual del paciente no depende únicamente de otros factores de riesgo como la diabetes o hipertensión, sino que otros parámetros lipídicos diferentes del LDL son también importantes y se relacionan con la progresión. Por tanto, si queremos mejorar los resultados y reducir el riesgo residual deberemos incluir en nuestras ecuaciones también al colesterol HDL o los niveles de apoB. Ésta última molécula sin embargo no está disponible de forma universal y su determinación es costosa, pero una buena aproximación a sus niveles se consigue calculando los niveles de colesterol no-HDL.
Referencia
- Ozgur Bayturan, Samir Kapadia, Stephen J. Nicholls, E. Murat Tuzcu, Mingyuan Shao, Kiyoko Uno, Ajai Shreevatsa, Andrea J. Lavoie, Kathy Wolski, Paul Schoenhagen, Steven E. Nissen
- J Am Coll Cardiol, 2010; 55:2736-2742