¿De qué se trata?
Artículo de revisión en el que se realiza una puesta al día del síndrome cardiorenal.
Circulation 2010; 121:2592–2600
El síndrome cardiorenal es una entidad compleja y no bien definida, cuyos mecanismos no están completamente aclarados. Se trata de un estado en el cual el tratamiento para aliviar la insuficiencia cardiaca está limitado por un empeoramiento de la función renal. Hay una interrelación entre el corazón y el riñón, de tal forma que cada uno de los órganos disfuncionantes puede iniciar y perpetuar el fallo en el otro órgano, por medio de una serie de mecanismos hemodinámicos, neurohumorales e inmunológicos.
La prevalencia de insuficiencia renal en pacientes con insuficiencia cardiaca es elevada. En el estudio ADHERE se estima que el 30% de los pacientes tienen antecedentes de insuficiencia renal. Además la insuficiencia renal es uno de los factores pronósticos más importantes en la insuficiencia cardiaca.
Existen varias hipótesis que intentan explicar la fisiopatología del síndrome. En primer lugar, el estado de bajo flujo que sucede en la insuficiencia cardiaca podría provocar una hipoperfusión renal con activación del sistema renina angiotensina aldosterona (SRAA), retención de sodio, disminución del filtrado renal y retención de volumen; sin embargo existen datos experimentales que no apoyan esta teoría. Otra hipótesis señala el incremento de la presión venosa central e intraabdominal como causa del síndrome, ya que el incremento de la presión altera el gradiente glomerular renal reduciendo el filtrado. Otras teorías hablan de una hiperactividad del sistema simpático, del SRAA o de una disfunción endotelial por daño oxidativo. La anemia también juega un papel importante. Está presente tanto en la insuficiencia renal como cardiaca y no está claro si es un marcador de enfermedad progresiva o un mediador del síndrome cardiorenal.
Implicaciones para el tratamiento
El deterioro de la función renal durante el tratamiento de la insuficiencia cardiaca por el síndrome cardiorenal hace que en muchas ocasiones se suspenda el tratamiento diurético y no se inicie tratamiento con IECA, con una inadecuada resolución de los síntomas del paciente. Por otro lado, hay que tener presente que el tratamiento con IECA o ARA II puede provocar una reduccción del filtrado renal incluso en pacientes en los que se benefician de su uso (reducción de eventos a pesar de incrementos en las cifras de creatinina), por lo que el médico debe ser tolerante ante determinados aumentos en la creatinina especialmente en pacientes con insuficiencia cardiaca en los que los IECA han demostrado un efecto beneficioso.
Comentarios
El síndrome cardiorenal es una entidad poco conocida pero de gran prevalencia e importancia. La función renal se encuentra deteriorada en muchos pacientes con insuficiencia cardiaca y constituye un poderoso factor pronóstico, además de limitar las opciones de tratamiento en estos pacientes. Un mejor conocimiento de los mecanismos implicados en este síndrome es de gran utilidad para el manejo clínico de los pacientes, por lo que este artículo de revisión es de lectura recomendable.
Referencia
Cardiorenal Syndrome. New Perspectives
- Jeremy S. Bock; Stephen S. Gottlieb
- Circulation 2010; 121:2592–2600