Los betabloqueantes (BB) han demostrado reducir la morbilidad y la mortalidad en la insuficiencia cardiaca crónica (IC) en los pacientes con fracción de eyección reducida, pero no está claro si la titulación de dosis más altas de BB mejora los resultados en estos pacientes.
El subanálisis del estudio HF-ACTION publicado esta semana en JACC analiza la relación entre la dosis de BB y el pronóstico. En dicho estudio, se incluyeron 2.331 pacientes ambulatorios con IC con disfunción sistólica (clase funcional NYHA II a IV y fracción de eyección <35%), aleatorizados a un programa de entrenamiento físico versus la atención habitual, con una mediana de seguimiento de hasta de 2,5 años. La dosis de BB al inicio del estudio se estandarizó con sus equivalentes de carvedilol y se analizó tanto como una variable continua como por grupos de dosis. El objetivo primario de valoración fue la mortalidad por cualquier causa u hospitalización por cualquier causa.
Un 95% de los pacientes estaban recibiendo un BB. La mediana de dosis de BB fue de 38 mg al día, y el rango de dosis más frecuente fue 26-50 mg al día (36% de la cohorte). Más del 73% de los pacientes no cambió su dosis de BB durante el seguimiento.
Se alcanzaron 1.430 (67%) eventos primarios (muerte u hospitalización). Se observó una relación inversa significativa entre la dosis de BB y dicho objetivo primario, pero no con otros criterios de valoración cardiovasculares tras el ajuste para otros factores pronósticos, con un beneficio lineal hasta la dosis de 50 mg al día. También se encontró una asociación significativa entre la dosis de BB y el cambio en el consumo pico de VO 2 a los 3 meses. No hubo aumento en la bradicardia con dosis más altas de BB.
Con estos resultados, los autores concluyen que existe una relación inversa significativa entre la dosis de BB y la muerte por cualquier causa o la hospitalización de pacientes con IC con disfunción sistólica, lo que apoya la recomendación establecida en las guías de ajustar las dosis de BB hasta la dosis de 50 mg/día.
Comentario
En este análisis, los pacientes que tomaban dosis más altas de BB tuvieron resultados ligeramente mejores tras más de 2,5 años de seguimiento. Estos resultados son muy positivos y apoyan las recomendaciones que hacen las guías de incrementar la dosis de BB hasta la dosis objetivo o la máxima dosis tolerada. Sin embargo, existen algunas limitaciones a este estudio. Los pacientes que tomaban dosis más altas de BB parecen ser menos enfermos (existe una tendencia hacia una mayor distancia recorrida en el test de los 6 minutos y una menor clase funcional NYHA). Además, no está claro por qué los médicos no incrementaron la dosis de BB que tomaban los pacientes, por lo que los resultados de este estudio realmente indican que los pacientes que toman dosis más elevadas de BB tienen mejor pronóstico, pero la respuesta de si incrementar la dosis de BB mejora el pronóstico permanece sin resolver.
Referencia
- Mona Fiuzat, PharmD, Daniel Wojdyla, Dalane Kitzman, Jerome Fleg, Steven J. Keteyian, William E. Kraus, Ileana L. Piña, David Whellan, Christopher M. O'Connor.
- J Am Coll Cardiol. 2012;60(3):208-215.