El síndrome de seno enfermo es una alteración de la conducción caracterizada por una disfunción del nodo sinoauricular que causa sintomatología. En el ECG se manifiesta bajo la forma de bradicardia/paro sinusal, bloqueo sinoauricular y en ocasiones se alterna con episodios de taquicardia supraventricular.
Los síntomas clásicos son el síncope, mareo, palpitaciones, disnea de esfuerzo, fatigabilidad, incompetencia cronotrópica, insuficiencia cardiaca y angina. Una repercusión clínica relevante requiere el implante de marcapasos definitivo, siendo la indicación principal en un 30-50% de los implantados en los EE. UU.
La información disponible acerca de la epidemiología de esta entidad es muy limitada. A pesar de que estudios pasados describieran las características de los individuos hospitalizados por este síndrome, la incidencia del mismo en la población general permanece sin aclarar. Además, no existen análisis previos de los potenciales factores de riesgo asociados a su incidencia.
Los objetivos de este análisis serían por tanto, determinar la edad de incidencia según sexos en pacientes de raza blanca y negra que habían participado en el estudio ARIC (Atherosclerosis Risk In Comunities) y el CHS (Cardiovascular Health Study), así como investigar los factores de riesgo cardiovascular (FRCV) asociados a la incidencia de disfunción sinusal sintomática (DSS).
De los integrantes de ambas poblaciones fueron excluidos aquellos que de forma basal tenían: evidencia de DSS, eran portadores de marcapasos, tenían fibrilación auricular o bradicardia sin betabloqueantes.
Durante los 17 años de seguimiento se identificaron 291 casos nuevos. La incidencia aumentó con la edad y fue similar en hombres y mujeres con cifras ligeramente mayores en la raza blanca. Se estimó que para el año 2012 habría habido una incidencia aproximada de 78.000 nuevos casos, número que incrementaría con el tiempo hasta cerca de 172.000 para el año 2060. Este incremento se podría explicar por la mayor longevidad que está experimentando la población en este siglo.
La incidencia de DSS se asoció con mayor presencia de FRCV como HTA y DM. Los pacientes tendían a mayor peso e IMC, mayores niveles de cistatina C y NT proBNP, más alteraciones basales en el sistema de conducción, menores frecuencias cardiacas y más antecedentes de eventos cardiovasculares mayores (ECV).
Comentario
Como puntos fuertes cabe destacar el gran número de individuos estudiados, el largo período de seguimiento y la fiabilidad de los datos validados por historiales de numerosas hospitalizaciones. Asimismo, en ambos trabajos se examinaron factores de riesgo y se usaron metodologías de estudio muy similares. Todo ello permitió hacer estimaciones combinadas de ambas cohortes obteniendo mayor potencia en los resultados estadísticos.Este estudio concluye que la incidencia de DNS: incrementa con la edad, no difiere entre sexos y tiene mayor prevalencia en individuos de raza blanca. Se estima que el número de diagnósticos al menos se duplicará en los próximos 50 años.
Igualmente se identificaron ciertos factores de riesgo para dicho síndrome, como bien un mayor IMC y peso, niveles más altos de NT pro BNP y cistatina C, más alteraciones de la conducción, HTA y antecedentes de eventos cardiovasculares mayores y menor FC en reposo.
Con un punto de vista traslacional los autores sugieren que son necesarios más estudios para clarificar los mecanismos bioquímicos y celulares que relacionen causalmente estos factores de riesgo descritos en el estudio con la infiltración degenerativa fibrótica del nodo sinusal y del tejido de conducción, ya que si ese conocimiento será difícil el diseño de estrategias preventivas eficaces.
Referencia
Incidence of and Risk Factors for Sick Sinus Syndrome in the General Population- Paul N. Jensen, Noelle N. Gronroos, Lin Y. Chen, Aaron R. Folsom, Chris deFilippi, Susan R. Heckbert, Alvaro Alonso.
- J Am Coll Cardiol. 2014;64(6):531-538.