¿De qué se trata?
La enfermedad coronaria es la causa más frecuente de muerte en el paciente diabético. Sin embargo, la detección de enfermedad coronaria en el paciente diabético asintomático es un tema controvertido. Para aclarar este punto se diseñó un estudio prospectivo en pacientes diabéticos tipo 2 con edades comprendidas entre 50 y 75 años, con debut de la DM a partir de los 30 años, en los que no había evidencia ni clínica ni electrocardiográfica de enfermedad coronaria.
JAMA. 2009;301(15):1547-1555
Los pacientes fueron aleatorizados a la realización de un estudio isotópico de perfusión miocárdica para detección de isquemia o no. El objetivo primario de valoración fue la mortalidad cardiaca o el infarto de miocardio. Se incluyeron 1.123 pacientes, los cuales tuvieron una tasa global de eventos de un 2,9% (0,6% por año). La tasa de eventos fue similar en ambos grupos (HR: 0,88 [0,44-1,88]; p=0,73). En el grupo con estudio isotópico, la mayoría tuvieron un resultado normal. En los pacientes con defectos de perfusión moderados o extensos, el riesgo de eventos fue superior que en los pacientes sin defectos de perfusión o defectos leves. Sin embargo, el valor predictivo positivo fue solo del 12%.
Comentarios
Los pacientes diabéticos son un grupo de pacientes con riesgo cardiovascular incrementado, por eso existe un creciente interés en la detección precoz de enfermedad coronaria en pacientes diabéticos asintomáticos. Algunas sociedades científicas recomiendan el estudio sistemático, pero hasta ahora no se ha realizado ningún estudio prospectivo que demuestre su utilidad. El estudio DIAD (Detección de Isquemia en Diabéticos Asintomáticos) pone en evidencia que los pacientes diabéticos tratados adecuadamente tienen una tasa de eventos muy baja. La realización de una detección precoz en estos pacientes no se asocia a una mejoría del pronóstico durante los 4,8 años de seguimiento medio realizado. Aunque es cierto que las anomalías en la persufión miocárdica se asociaron a un peor pronóstico, la mayoría de los pacientes diabéticos estudiados tuvieron un resultado negativo, por lo que el valor predictivo positivo de la prueba es muy bajo (12%). Además, más de la mitad de los eventos que aparecieron en el grupo estudiado fue en pacientes sin defectos de perfusión, lo que supone un problema para el estudio sistemático.
Por tanto, ante estos resultados no se puede recomendar el estudio sistemático del paciente diabético por cuatro razones fundamentales:
- La baja probabilidad de detección de defectos de perfusión.
- La baja tasa de eventos, incluso en pacientes con defectos moderados o extensos de perfusión (2,4% por año).
- La ausencia de mejoría en el pronóstico de los pacientes estudiados sistemáticamente.
- El elevado coste económico que supondría un estudio de todos los pacientes diabéticos.
Referencia
- Young LH, Wackers FJ, Chyun DA, Davey JA, Barrett EJ, Taillefer R, Heller GV, Iskandrian AE, Wittlin SD, Filipchuk N, Ratner RE, Inzucchi SE; DIAD Investigators
- JAMA. 2009;301(15):1547-1555