No todos los días tiene uno la oportunidad de comentar un hecho histórico relativo a nuestro ejercicio profesional. Hoy es uno de ellos, no por un logro científico de envergadura (ojalá así fuese), sino por el anuncio del lanzamiento del número 1, volumen 1 de una publicación, REC: Interventional Cardiology.
Hace ya unos dos años que comenzamos a gestar esta revista, sueño entonces y realidad hoy. Sin duda el crecimiento del intervencionismo, su enorme expansión en posibilidades técnicas e indicaciones clínicas dejaba estrecho el espacio que REC podía ofrecer a la creciente producción científica en este campo de la cardiología.
Por ello era necesario que en el sistema de REC surgiera, como ha ocurrido en el ámbito de otros journals internacionales de prestigio, una sister journal o, como decimos aquí, una revista hija dedicada plenamente al intervencionismo.
Bajo iniciativa de la Sección de Hemodinámica y Cardiología Intervencionista (Armando Pérez de Prado, Oriol Rodríguez Leor, Belén Cid y Raúl Moreno) nos pusimos manos a la obra junto a los elegidos como equipo editorial (Fernando Alfonso, Juan Sanchis, Raúl Moreno y el que suscribe como editor jefe, José M. de la Torre Hernández) de la mano de las profesionales impecables de la oficina editorial de REC: Iria del Río, Eva Cardenal, Belén Juan, María González y Helena Gómez. Todo ello contando con el apoyo del editor de REC, Ignacio Ferreira, y del Comité Ejecutivo de la SEC.
La vocación de la revista estuvo clara desde un principio: permitir el intercambio de ciencia, de conocimiento y de experiencias entre los cardiólogos intervencionistas de nuestro país, pero también de más países hispanohablantes y de otros que no lo son.
Para hacerlo posible era preciso que se cumplieran tres condiciones: versión bilingüe castellano-inglés, presencia preferentemente online y, finalmente, carácter totalmente abierto, gratuito, de todos sus contenidos.
En este punto no podemos obviar un aspecto puntal: la financiación. Todo esto tenía que poder sufragarse, y aquí surge el apoyo definitivo de la industria de dispositivos y fármacos de nuestro entorno, que de forma decidida cubre íntegramente el presupuesto, respetando siempre la independencia editorial y científica que consideramos irrenunciable en nuestra publicación.
Esas tres condiciones fueron asumidas de tal manera por todo el equipo que determinaron, sin ninguna fisura, la elección de la compañía editorial (Permanyer) y los siguientes movimientos y negociaciones.
Con las ideas claras y el proyecto definido, avanzamos en la elaboración de una estructura que proporcionara los espacios adecuados a nuestros contenidos (artículos originales, editoriales, casos, revisiones, debates, imágenes y noticias de innovación). También, y esto es clave, se designó un amplio comité editorial con miembros nacionales e internacionales. En él, como se suele decir, no están todos los que son pero son todos los que están. Y es que si bien fue fácil incluir nombres de profesionales de calidad y compromiso, fue complicado poner un límite al número de integrantes, pero había que hacerlo. No obstante, tenemos claro el carácter dinámico del comité y la necesaria renovación que tiene que experimentar cada cierto tiempo.
Pues bien, con todo preparado se lanzó la invitación a recibir manuscritos originales, casos e imágenes y se encargaron a autores de prestigio los contenidos por invitación. La respuesta fue fantástica, los autores enviaron sus escritos de encargo en tiempo, con una calidad digna de los journals de mayor nivel. Los trabajos remitidos por investigadores fueron evaluados por muchos de los miembros del comité, en tiempos muy cortos y con altísima calidad. Se aceptaron muchos y, desafortunadamente, se tuvieron que rechazar algunos.
La meticulosa profesionalidad de la oficina editorial de REC, el trabajo del equipo editorial y el esfuerzo adaptativo de Permanyer, en suma, las enormes ganas de todos, permitieron por fin tener un numero completo, ¡el primero! , y pronto llegamos a tener también el segundo.
Para la inauguración del primer número, aunque la revista fuese esencialmente online, era preciso disponer de una impresión en papel para que la «criatura» fuera recogida entre las manos, abierta, leída, olida, como los buenos libros, por parte de los cardiólogos intervencionistas, cardiólogos clínicos, enfermería, profesionales de la industria, etc.
En el congreso de la Sección de Hemodinámica y Cardiología Intervencionista de 2019 se presentó y entregó el primer número, del que recibimos comentarios muy favorables. Ahora mismo ya todos podéis consultarlo en ordenador, tableta o móvil, con la posibilidad de descargar todos sus contenidos, en www.recintervcardiol.org.
Os invito no solo a leerla y disfrutarla, sino también a contribuir como autores, y también pido vuestra colaboración inestimable como evaluadores cuando seáis invitados. Somos conscientes de la inevitable limitación de la indexación en esta primera etapa, pero desde luego vuestra colaboración logrará hacer crecer esta revista que es de todos y garantizará su futuro impacto.
Ahora nos toca seguir trabajando, aprendiendo, creciendo, para corregir defectos y mejorar, apuntando a objetivos necesarios como la indexación y posteriormente las métricas de impacto. Pero sobre todo, queremos mejorar para servir cada vez mejor a la comunidad de los cardiólogos intervencionistas y también a todos los profesionales interesados en el apasionante campo de nuestra subespecialidad.
Jose M. de la Torre Hernández
Editor Jefe REC: Interventional Cardiology