El Congreso de las Enfermedades Cardiovasculares SEC 2018 ha servido de escenario para la primera reunión de los investigadores del Proyecto BRAKE-AF (IvaBRAdine blocK of Funny Current for Heart Rate Control in permanEnt Atrial Fibrillation). Un proyecto que, tal y como explica el Dr. Adolfo Fontenla Cerezuela, “surge ante la necesidad de ampliar el limitado arsenal farmacológico en el campo de las arritmias cardiacas”.
Y es que, prosigue el experto, el escaso desarrollo industrial de nuevos fármacos antiarrítmicos “nos obliga a evaluar el efecto antiarrítmico de otras moléculas desarrolladas y comercializadas con una indicación diferente”.
BRAKE-AF es un estudio traslacional en el que están involucrados farmacólogos de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), así como cardiólogos clínicos y electrofisiólogos de nueve hospitales españoles: Hospital 12 de Octubre, Hospital La Paz, Hospital Puerta de Hierro, Hospital de Getafe, Hospital Ramón y Cajal, Fundación Jiménez Díaz, Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles, Hospital Virgen de la Salud de Toledo y Hospital de Burgos.
“Se trata de una investigación independiente, sin ánimo comercial, que se financia a través de una beca concedida por el Instituto Carlos III”, explica Fontenla, quien añade que “evaluará en un ensayo clínico aleatorizado el papel de ivabradina como fármaco frenador de la conducción AV en fibrilación auricular, tanto a nivel celular como en clínica”.
Aunque los estudios celulares están en marcha desde hace meses, el ensayo clínico acaba de iniciar el reclutamiento de pacientes. De hecho, “el primero de los 232 pacientes fue reclutado recientemente en el Hospital 12 de Octubre de Madrid, centro que lidera el proyecto”, cuenta el investigador. Por eso, este encuentro ha constituido una oportunidad única para coordinar y planificar el arranque del estudio en el resto de centros.