El implante percutáneo de válvula aórtica (TAVI) es una terapia consolidada en pacientes con estenosis aórtica grave sintomática. Los distintos avances tecnológicos, así como las curvas de aprendizaje, ya superadas por parte de los distintos equipos multidisciplinares, han mejorado sustancialmente los resultados clínicos a corto y medio plazo.
La integración de la información anatómica y funcional obtenida de los métodos de imagen multimodal ha mejorado la adecuada selección del tamaño de las prótesis, nos ha ayudado a decidir qué pacientes van a beneficiarse más de esta terapia y a comprender mejor cómo se comportan estos dispositivos en el seguimiento. Además, la utilización del TAVI en nuevos escenarios clínicos es ya una realidad. Por un lado, se utiliza en pacientes más jóvenes con riesgo quirúrgico bajo, y por otro, en pacientes más complejos con bioprótesis disfuncionantes, válvulas aórticas bicúspides o con insuficiencia aórtica grave.
Este artículo de revisión resume cómo la imagen multimodal (sobre todo la cardio-TC) puede integrarse y ser de utilidad en la evaluación de estos pacientes en algunas ocasiones complejos, que no han sido incluidos en los estudios clínicos pivotales.
Comentario
El TAVI es una terapia consolidada en pacientes con estenosis aórtica grave sintomática. Los distintos estudios pivotales han demostrado su utilidad en pacientes no subsidiarios de cirugía convencional, así como en sujetos con riesgo quirúrgico bajo, intermedio y alto.
Este artículo de revisión se centra en la utilidad de la imagen multimodal en escenarios clínicos complejos y novedosos. La técnica de referencia es la cardio-TC.
Los autores revisan la utilidad de esta técnica en lo que llaman situaciones de incertidumbre, como son la adecuada medición del tamaño del anillo aórtico, la presencia de mismatch después del TAVI, la correcta evaluación de los pacientes con estenosis aórtica de bajo gradiente, la presencia de enfermedad en otras válvulas cardiacas, así como para evaluar la presencia de trombosis después del TAVI. En el caso de la presencia de enfermedad valvular concomitante sugieren la utilización del MitraClip cuando la insuficiencia mitral no es funcional.
En la parte final de la revisión evalúan la utilidad de la imagen multimodal en situaciones clínicas donde el TAVI puede ser de utilidad (valve-in-valve, válvula aórtica bicúspide e insuficiencia aórtica grave). Cuando se va realizar el implante sobre una bioprótesis aórtica es importante conocer el mecanismo de disfunción y el riesgo de obstrucción coronaria. La selección del tamaño de la prótesis a implantar depende más de la prótesis quirúrgica que tenga y existen aplicaciones que nos ayudan en esta elección (http://www.ubqo.com/viv).
El trabajo de síntesis realizado por los autores, así como la excelente iconografía facilita la lectura del artículo.
Referencia
- Jeroen J. Bax, Victoria Delgado, Rebecca T. Hahn, Jonathon Leipsic, James K. Min, Paul Grayburn, Lars Sondergaard, Sung-Han Yoon and Stephan Windecker.
- J Am Coll Cardiol Img. 2020; 13: 124–39.