Estudio que analiza los eventos a largo plazo y las causas de muerte en los ciclistas de élite que han participado en el Tour de Francia.
Los beneficios de la actividad física regular son bien conocidos y se recomienda para la prevención primaria y secundaria de las enfermedades cardiovasculares. Mientras que el beneficio de la actividad física regular moderada se ha demostrado claramente, existe controversia sobre los posibles efectos adversos de la actividad física regular extenuante. En este contexto, el seguimiento de los eventos a largo plazo de los atletas de élite es de especial interés, aunque son escasos los datos sobre este tema.
Las características y la situación vital de todos los participantes franceses en el Tour de Francia se recogieron para el periodo de 1947-2012. Las causas de muerte se obtuvieron a partir de 1968. La mortalidad general y la mortalidad por enfermedades específicas se compararon con la población masculina francesa usando razones de mortalidad estandarizadas globales y específicas (SMR). Los ciclistas fueron seguidos durante una media de 37,4 años. Entre los 786 ciclistas franceses que participaron al menos una vez entre 1947 y 2012, 208 (26%) murieron antes del 1 de septiembre de 2012. Las neoplasias y las enfermedades cardiovasculares representaron el 61% de las muertes. Se observó una mortalidad 41% menor en los ciclistas franceses (SMR: 0,59, IC 95%: 0,51 a 0,68, P <0,0001), que no cambia con el tiempo (P = 0,70). Respecto a las principales causas de mortalidad, se observó una menor mortalidad por neoplasias (SMR: 0,56, IC 95%: 0,42 a 0,72, P <0,0001) y por muerte cardiovascular (SMR: 0,67, IC 95%: 0,50-0,88, P = 0,004), pero no por mortalidad relacionada con causas externas (SMR: 1,06, IC 95%: 0,71 a 1,53, P = 0,80).
Con estos datos los autores concluyen que en los participantes en el Tour de Francia, en comparación con la población masculina general, se observó una mortalidad sustancial y significativamente menor, sin embargo, estos resultados no permiten evaluar en detalle el equilibrio entre los efectos positivos de la actividad deportiva de alto nivel y la selección de los atletas de élite sanos, frente a los posibles efectos nocivos de la actividad física excesiva o presunto dopaje.
Comentario
Los ciclistas de élite que participan en el Tour de Francia tienen una mortalidad significativamente menor en comparación con la población general masculina en Francia, según los resultados del estudio publicado como parte del Congreso ESC 2013 y en el European Heart Journal. El estudio, basado en 786 ciclistas franceses que participaron en el Tour de Francia entre 1947 y 2012, encontró una tasa de mortalidad de 41% menor entre los ciclistas, en comparación con la población masculina general francesa. Los autores del estudio, sin embargo, sugieren que sus resultados deben ser tomados con cautela por varias razones. En primer lugar, solo los individuos más sanos y más fuertes son capaces de competir en el Tour, por lo que es bastante difícil de comparar con la población general francesa. En segundo lugar, la participación en el Tour de Francia es solo un breve periodo de tiempo en la vida del ciclista, lo que limita la capacidad de vincular de manera concluyente su participación en el Tour con la disminución de la mortalidad. Por último, los autores del estudio no fueron capaces de estimar directamente los efectos del dopaje. Debido a la gran cantidad de factores de confusión, es difícil sacar conclusiones concretas y significativas con respecto a los efectos del ejercicio intenso de resistencia sobre la mortalidad a partir de los datos que se presentan.
Referencia
Mortality of French Participants in the Tour de France (1947–2012)
- Eloi Marijon, Muriel Tafflet, Juliana Antero-Jacquemin, Nour El Helou, Geoffroy Berthelot, David S. Celermajer, Wulfran Bougouin, Nicolas Combes, Olivier Hermine, Jean-Philippe Empana, Grégoire Rey, Jean-François Toussaint y Xavier Jouven.
- Eur Heart J (2013) doi: 10.1093/eurheartj/eht347.