Un estudio ha mostrado que los pacientes atendidos por mujeres médicos, presentaron menor mortalidad y tasa de reingresos que aquellos que atendidos por médicos hombres en los mismos hospitales.
Los autores analizan a los beneficiarios de Medicare que fueron hospitalizados por causas médicas agudas, desde el 1 de enero de 2011 hasta el 31 de diciembre de 2014. Contabilizaron la mortalidad a 30 días y las tasas de reingresos de más de un millón y medio de pacientes hospitalizados y evaluaban sí el género del médico que les había atendido durante la hospitalización podía influir en estos eventos clínicos.
Un total de 58.344 médicos diferentes de diversas especialidades médicas trataron a los pacientes incluidos en el estudio y 18,751 (32,1%) de estos profesionales eran mujeres. Comparando las características de los médicos incluidos en el análisis, las mujeres eran más jóvenes (media de 42,8 vs. 47,8 años) y trataban menos pacientes anualmente (131,9 vs. 180,5 pacientes hospitalizados).
Las características de los pacientes que fueron tratados por mujeres médicos eran similares a los tratados por hombres respecto a la edad (80,8 y 80,6 años respectivamente), raza, ingresos, cobertura médica y comorbilidades. Se observó una pequeña mayor proporción de mujeres que fueron atendidas por mujeres (62,1% vs. 60,2%).
Respecto al resultados en tasa de mortalidad a los 30 días del alta, del total de la muestra (1.583.028 hospitalizados, fallecieron 179.162). Ajustado por hospitales y el género de los médicos, la tasa de pacientes atendidos por mujeres que fallecieron fue del 11,07% comparado con el 11,49% de los tratados por médicos varones (la diferencia ajustada de riesgo resultó de −0,43%; con un intervalo de confianza 95% frente a −0,57%; p<.001). El número de pacientes a tratar fue de 233.
En el análisis de reingresos a los 30 días también se incluyeron 1.540.797 hospitalizaciones tratadas por 57,876 médicos, con una tasa de reingresos del 15,42% (237.644 reingresos). La tasa ajustada de reingresos por paciente atendido por un médico mujer fue del 15,02% comparado con el 15,57% para pacientes atendidos por médicos varones (el diferencia ajustada de riesgo de −0,55%; intervalo de confianza 95%, −0,71%, p<.001). El número de pacientes a tratar fue de 182 según publican los autores.
Analizando diferentes condiciones médicas, se mantenían diferencias en mortalidad y reingresos. Se observaron mejores resultados en mortalidad en los pacientes tratados por mujeres médicos en diagnósticos al alta de sepsis, neumonía, insuficiencia renal aguda y arritmia. La diferencia en mortalidad por género del médico no resultó ser estadísticamente significativa en pacientes con insuficiencia cardiaca, infección urinaria y hemorragia gastrointestinal. En el reingreso, las diferencias se extendían a todos los diagnósticos.
Los autores estiman que si la relación encontrada entre el género del médico y los resultados fuera causal, si los 10 millones de hospitalizaciones anuales de Medicare por causas médicas fueran atendidos por mujeres se podría evitar la muerte de 32.000 pacientes año.
Los autores concluyen que probablemente las diferentes formas de afrontar los problemas entre hombres y mujeres puede jugar un rol en una asistencia diferente y en los mejores resultados clínicos que ellas obtienen. Señalan que trabajos previos han mostrado que las mujeres médicos pasan más tiempo por paciente y consulta, tienen mayor facilidad de comunicación y empatía.
En una editorial de la revista destacan que a pesar de estos hallazgos en los resultados obtenidos por las mujeres demostrando adecuada preparación y dedicación, existe una brecha en el pago y la promoción en su perjuicio frente a los hombres, tanto en el ámbito profesional como académico.
Referencias
- Yusuke Tsugawa, Anupam B. Jena, Jose F. Figueroa, et al.
- JAMA Intern Med. Published online December 19, 2016. doi:10.1001/jamainternmed.2016.7875
Women in Medicine and Patient Outcomes Equal Rights for Better Work?
- Anna L. Parks, Rita F. Redberg.
- JAMA Intern Med. Published online December 19, 2016. doi:10.1001/jamainternmed.2016.7883