Tratamiento de la hipercolesterolemia en prevención secundaria: dónde estamos y hacia dónde vamos
- Dr. Manuel P. Anguita Sánchez
- Actualidad en cardiología clínica
- Mayo 2019
La enfermedad cardiovascular aterosclerótica, representada básicamente por el infarto de miocardio y el ictus, es una de las principales causas de muerte en los países occidentales.
Dislipemias: nuevas evidencias en la identificación de subgrupos donde los anti-PCSK9 ofrecen un mayor beneficio
- Dr. Esteban López de Sá y Areses
- Actualidad en cardiología clínica
- Mayo 2019
Cuando un ensayo clínico ha sido realizado en una amplia población de pacientes con características heterogéneas, sus resultados pueden extrapolarse a una gran variedad de enfermos. Esto, que a priori constituye una fortaleza, nos puede impedir precisar si los resultados son realmente aplicables a pacientes con características determinadas1.
Novedades en la reducción de eventos cardiovasculares con tratamientos hipolipemiantes
- Dr. Juan Cosín Sales
- Actualidad en cardiología clínica
- Mayo 2019
En el último año se han publicado varios estudios sobre tratamientos hipolipemiantes, y lo más importante es que al menos en dos de ellos se ha demostrado reducción de eventos cardiovasculares en su objetivo principal. Estos estudios son el REDUCE-IT1 y el ODYSSEY OUTCOMES2. También se han publicado y/o comunicado datos sobre la eficacia hipolipemiante del ácido bempedoico en los estudios CLEAR Harmony3 y CLEAR Wisdom4, con demostración también de reducción de eventos cardiovasculares, pero como objetivo secundario en este último.
Evolución y manejo dislipémico en el paciente con SCA durante el primer año
- Dr. Vicente Arrarte Esteban
- Actualidad en cardiología clínica
- Mayo 2019
El alta hospitalaria es el momento ideal para iniciar un tratamiento que tenga como objetivo reducir el colesterol LDL (cLDL) lo más posible y, por lo menos, por debajo de 70 mg/dl, al tratarse ya de un paciente de muy alto riesgo vascular1. Además, según la línea de las últimas recomendaciones, como la de los endocrinos estadounidenses2, esta estrategia debe ser aún más agresiva, alcanzando valores por debajo de 55 mg/dl en los pacientes de más riesgo por diabetes, insuficiencia renal, insuficiencia cardiaca o eventos de repetición.