Formar en competencias es conseguir que el alumno adquiera una capacidad real y demostrada donde se integran los conocimientos (saberes), habilidades y destrezas (saber hacer), actitudes y comportamientos (saber estar), y valores y creencias (saber ser). En definitiva, el desempeño (performance). Un curso celebrado en el Congreso de las Enfermedades Cardiovasculares SEC 2018 ha formado en competencias a los jóvenes cardiólogos.
“El médico ha de saber responder a los cambios y transiciones sanitarias que se están dando en nuestra sociedad, así como a la confianza otorgada por los pacientes. Por ello, se hace imprescindible la formación de los profesionales en competencias”, opina la Dra. Ana Isabel Huelmos Rodrigo. A su juicio, “esta formación en competencias tiene que empezar en el pregrado, continuar durante la residencia y seguir durante toda la vida profesional, puesto que nunca se puede decir que uno está completamente formado en una competencia y siempre se puede mejorar”.
En base a esta necesidad, el curso ha tratado de acercar a los participantes a los planteamientos de formación médica basada en competencias, revisando el concepto, definición, metodología y evaluación. Así, se ha podido reflexionar y comprender los fundamentos y rasgos más característicos de la Formación Basada en Competencias (FBC) y sus implicaciones en la educación médica, identificar y planear distintas metodologías activas en la FBC, analizar y diferenciar técnicas, estrategias e instrumentos para la evaluación de una FBC en educación médica, y aplicar un enfoque de FBC a través de casos concretos. En definitiva, indica la Dra. Huelmos, “se ha ofrecido una formación de interés para cualquier cardiólogo, tutor de residentes o no, interesado en la educación y formación en nuestro ámbito, aportándoles una visión global de la Formación Médica Basada en Competencias para aplicarla a la formación del residente de Cardiología”.
Las 7 competencias “capitales”
Y como lecciones prácticas, esta actividad ha permitido recalcar las 7 competencias clave que es obligatorio que el médico de hoy adquiera”: 1. Profesionalidad; 2. Comunicación; 3. Cuidados del paciente y habilidades clínicas; 4. Conocimientos; 5. Práctica basada en el contexto del Sistema de Salud; 6. Práctica basada en el aprendizaje y la mejora continua (análisis crítico y autoaprendizaje); 7. Manejo de la información.
En síntesis, “el médico de hoy no solo debe adquirir conocimientos y habilidades clínicas, sino otras competencias relacionadas con la comunicación, gestión y profesionalismo”, afirma la experta.
Un médico 10
En general, hasta ahora, como indica la Dra. Huelmos, “hemos tenido un modelo de médico no formado en diferentes competencias, porque no se veía necesario. Se trataba de un modelo de formación simplista basado en los conocimientos médicos”. Sin embargo, ahora se busca un médico 10:
- Que trate enfermos, no enfermedades
- Con actitud crítica
- Comunicador y empático
- Responsable individual y socialmente
- Que tome buenas decisiones para el paciente y para el sistema
- Líder del equipo asistencial
- Competente, efectivo y seguro
- Honrado y confiable
- Comprometido con el paciente y con la organización
- Que vive los valores del profesionalismo
Según considera la Dra. Ana Isabel Huelmos, “la Cardiología está siendo pionera en esta FBC, utilizando durante el periodo formativo métodos de aprendizaje acordes con ella, como lo demuestra el curso de simulación para residentes, así como los diversos cursos de formación para tutores”.
Como mensaje final, la coordinadora de este curso subraya que “la Formación Médica Basada en Competencias ya es un hecho en España. El proceso de cambio se ha iniciado. La formación, la evaluación y el reconocimiento del desarrollo de competencias en los profesionales hará de ellos médicos excelentes, siendo este el factor esencial para la mejora continua en el cumplimiento de los fines del sistema sanitario español”.