La Enfermería actual se encuentra en un período de cambio organizativo en el que la flexibilidad y la gestión son prioritarias en el modelo asistencial, centrado no solo en el manejo adecuado de la enfermedad, sino también en la prevención y promoción de la salud, donde la relación terapéutica, pilar de la profesión enfermera, es imprescindible para fomentar el autocuidado y conseguir reducir el impacto de las enfermedades cardiovasculares.
El profesional de enfermería en el área de cardiología es parte activa de un equipo multidisciplinar con competencias en cuidados avanzados, y desempeña un rol y funciones específicas a nivel individual y comunitario. Por esta razón necesita estar al corriente de los más actualizados conocimientos científicos, tecnológicos y modelos de práctica asistencial, para así responder a las demandas de la población y cumplir con la responsabilidad que como profesional sanitario tiene.
Unido a lo anterior, la sociedad actual nos plantea diariamente complejos retos que nos conducen a hacernos diversas cuestiones sobre nuestra propia identidad: ¿cuál es el papel de enfermería en el modelo de salud actual? ¿Puede desempeñar su rol con autonomía y rigor científico? ¿Sabe darse a conocer?
¿Cuál es su papel en el modelo de salud actual?
El profesional de enfermería en cardiología tiene una importante labor en la atención primaria y la atención especializada, tanto en el ámbito asistencial, como docente, de gestión y de investigación. La existencia de pacientes cada vez más añosos con numerosas comorbilidades, mayor demanda asistencial y nuevas tecnologías emergentes, es una oportunidad para el desarrollo de las competencias del profesional de Enfermería, y a la vez hace necesaria su presencia en áreas de organización, planificación y gestión de los servicios sanitarios.
El paciente actual es un paciente más informado, exigente y con mayor acceso a la información, que requiere los servicios de un profesional experto que sea capaz de satisfacer sus expectativas. El profesional de enfermería es el profesional sanitario más cercano a los pacientes y familiares, y por ende el referente en la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, fomentando el autocuidado y mejorando la calidad de vida.
Esta cercanía nos obliga a hacer un esfuerzo por empoderar a pacientes y familiares en el proceso de salud-enfermedad y trabajar conjuntamente en todos los niveles asistenciales en los que enfermería participa y ejerce sus competencias, para garantizar servicios de calidad, eficaces y seguros.
¿Puede desempeñar su rol con autonomía y rigor científico?
El perfil profesional integra los valores y las competencias profesionales y personales (conocimientos, habilidades y actitudes) que el enfermero/a debe alcanzar para ejercer su actividad de forma autónoma, perfeccionar permanentemente su práctica y adaptarse a un entorno en constante evolución y cada vez más competitivo.
Los continuos avances tecnológicos, el nuevo modelo de asistencia integral a la salud y, sobre todo, la demanda de calidad/eficiencia y la seguridad para el paciente, justifican la necesidad de implementar un perfil profesional enfermero, legitimado, con enfermeros cualificados y capacitados en cuidados cardiológicos avanzados, para alcanzar la excelencia de los cuidados y responder a las demandas de una población, cada vez más exigente con los cuidados de salud.
Adquirir habilidades en el manejo de las nuevas tecnologías, nuevas técnicas, nuevos protocolos, requiere la formación de las enfermeras ante nuevas competencias y un desarrollo profesional permanente, con capacidad para tomar decisiones e implementar los cambios necesarios que den un valor añadido a nuestra profesión, con los mejores resultados de salud y la máxima calidad asistencial. La formación y la investigación es el camino, pero sin duda es la propia enfermería la que debe ser consciente de esta necesidad, aunar fuerzas y trabajar para lograr este objetivo común, que permita reforzar nuestra identidad propia.
Si bien la especialidad de Enfermería en Cardiología no está reconocida, son muchos los enfermeros que realizan diariamente sus competencias de manera autónoma e independiente, en consultas propias de Enfermería en Rehabilitación Cardiaca, Insuficiencia Cardiaca y Electrofisiología, con formación específica, siempre basándose en protocolos consensuados y garantizando la seguridad del paciente.
En este sentido, desde la Asociación Española de Enfermería en Cardiología estamos trabajando activamente para que esta labor tan “específica” sea reconocida por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y las enfermeras que desempeñan su función en ámbitos cardiológicos puedan disponer en un futuro de la acreditación correspondiente.
¿Sabe darse a conocer?
La historia de la Enfermería es una historia de evolución. Hoy día, los alumnos que por primera se disponen a estudiar Enfermería lo hacen a sabiendas de que estudian un Grado Universitario de 4 años de una alta calidad científico-técnica. La formación de postgrado está también a su disposición, así como la posibilidad de alcanzar el título de Doctor sin necesidad de caminos secundarios.
Sin embargo, esta evolución aún está pendiente de ser totalmente percibida por la sociedad. Para muchas personas Enfermería no tiene un perfil de imagen como profesión, sino más bien como una vocación, manteniendo una imagen y creencias acarreadas del pasado. Así, la enfermera es vista por una gran parte de la sociedad como mera ejecutora de órdenes médicas y realizadora de técnicas, sin ser conscientes de que eso es solo una parte de otras muchas actividades propias que realiza de manera autónoma, dentro de un equipo multidisciplinar.
Enfermería ha de poner en valor el papel que desempeña, y tiene la obligación de dar a conocer su trabajo, con respeto, pero sin miedo y orgullosa de sí misma. La realización de campañas de promoción y/o prevención de salud, campañas sociales o charlas formativas son un buen ejemplo de acercamiento a la sociedad y al resto de profesionales sanitarios. Movimientos como el de #EnfermeríaVisible velan porque la imagen que se proyecta de Enfermería sea una imagen real, moderna y actualizada, dando a conocer su rol y demostrando su influencia en la sociedad y lo que es capaz de conseguir en resultados de salud.