El síndrome de tako-tsubo (STT) en una patología aguda reversible, inicialmente entendida como benigna y autolimitada. Sin embargo, existe poco conocimiento acerca de su pronóstico en función de los diferentes desencadenantes. Este estudio compara los resultados a corto y largo plazo según los diferentes desencadenantes, centrándose en los eventos físicos.
Se analizaron los pacientes con un diagnóstico definitivo de STT incluidos en el Registro Español de STT (RETAKO). Los resultados a corto y largo plazo fueron comparados entre los diferentes grupos según los factores desencadenantes. Un total de 939 pacientes fueron incluidos. Se detectó un desencadenante emocional en 340 pacientes (36,2%), físico en 293 pacientes (31,2%) y no se identificó ninguno en 306 pacientes (32,6%). Los principales desencadenantes físicos observados fueron: infecciones (30,7%), procedimientos quirúrgicos (22,5%), actividades físicas (18,4%), episodios de hipoxia grave (18,4%) y eventos neurológicos (18,4%). Los STT desencadenados por factores físicos mostraron una mayor mortalidad a corto y largo plazo, y dentro de este grupo, aquellos en los que el desencadenante físico fue hipoxia fueron los que tuvieron un peor pronóstico, identificándose como factores pronósticos negativos la edad > 70 años, diabetes mellitus, fracción de eyección < 30% y shock.
El STT desencadenado por factores físicos podría presentar un peor pronóstico en términos de mortalidad. Bajo la etiqueta de STT podrían encontrarse muchos perfiles clínicos distintos aun no identificados, cuya diferenciación podría llevar a un mejor manejo, así como a desterrar la creencia de que STT tiene un buen pronóstico.
Comentario
El síndrome de tako-stubo es una patología que simula, electrocardiográfica y clínicamente, al infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST y que habitualmente se diagnostica en el contexto de una coronariografía urgente sin lesiones y un patrón típico de hipercontractilidad basal y aquinesia apical y media.
Se han propuesto múltiples mecanismos fisiopatológicos como el vasoespasmo coronario, disfunción endotelial o toxicidad a catecolaminas. Clásicamente se consideraba que el desencadenante era un episodio de estrés emocional intenso, pero con el paso de los años se ha ido demostrando que existen, además del emocional, otros desencadenantes físicos como la infección, la hipoxia, cirugía u otros y en una proporción significativa de pacientes no es posible identificar el desencadenante.
Este estudio analiza la mortalidad a corto y largo plazo de pacientes con STT y las compara en función del desencadenante, diferenciando el emocional (STT primario) y los físicos (STT secundario) en un registro español de casi 1.000 pacientes.
Los resultados más significativos fueron:
- La mortalidad del STT, tanto a corto como a medio plazo, depende del si el desencadenante es físico o emocional.
- Los pacientes con un desencadenante emocional tienen un mejor pronóstico que aquellos con uno físico.
- No todos los desencadenantes físicos influyen igual en el pronóstico, siendo el más deletéreo la hipoxia.
Así, se ha de tener en cuenta la etiología del STT y desterrar la creencia de que se trata de una patología siempre benigna. Aunque el pronóstico puede ser razonablemente bueno en aquellos con un desencadenante emocional, este estudio presenta claros resultados de que los físicos, y en especial la hipoxia grave, hacen que estos pacientes presenten mayor mortalidad.
Es por ello que debemos de tener en cuenta no solo el patrón electrocardiográfico y angiográfico del paciente sino todo el contexto clínico y considerar el STT “secundario” o con desencadenantes físicos, como una manifestación grave de una patología subyacente y esto debe llevar a un manejo médico más intensivo, tanto en la fase hospitalaria como en el seguimiento ambulatorio, ya que pronóstico es peor tanto a corto como a largo plazo.
Existen ciertas limitaciones en este estudio, el principal su carácter observacional en el que no se pueden identificar posibles variables confusoras no medidas. Por otro lado, la división de los STT de desencadenante físico en ocho categorías disminuye el tamaño muestral de cada grupo y por tanto la posibilidad de observar diferencias entre ellos.
Referencia
- Aitor Uribarri, Iván J. Núñez Gil , D. Aritza Conty, Oscar Vedia, Manuel Almendro Delia, Albert Duran Cambra, Agustin C. Martin Garcia, Marisa Barrionuevo Sánchez, Manuel Martínez Sellés, Sergio Raposeiras Roubín, Marta Guillén, Jose Maria Garcia Acuña, Lucía Matute Blanco, José A. Linares Vicente, Alejandro Sánchez Grande Flecha, Mireia Andrés, Alberto Pérez Castellanos, Javier Lopez Pais.
- J Am Heart Assoc. 2019 Dec 17;8(24):e013701. doi: 10.1161/JAHA.119.013701. Epub 2019 Dec 13.