Las muertes prematuras de culturistas han generado interrogantes sobre la seguridad y los riesgos asociados a esta disciplina. El principal objetivo de este estudio fue analizar el riesgo de mortalidad en una amplia población internacional de culturistas.
Se identificaron, a través del registro web de la Federación Internacional de Fisicoculturismo y Fitness (IFBB), atletas masculinos que participaron en competiciones de culturismo entre 2005 y 2020, clasificándolos según edad, división y nivel.
Para cada atleta se realizó una búsqueda web estandarizada diseñada para detectar fallecimientos, con seguimiento hasta julio de 2023. Las tasas de mortalidad se calcularon tanto como tasa de incidencia general durante el período estudiado, como la tasa anual de incidencia entre quienes compitieron en, al menos, un evento al año anterior (atletas en activo).
Se identificaron 20.286 atletas que compitieron en 730 eventos, con un seguimiento promedio de 8,1 ± 3,8 años (equivalente a 190,211 años-atleta de observación). Se documentaron 121 muertes: 73 fueron consideradas muertes súbitas, de las cuales 46 fueron clasificadas como muertes súbitas cardiacas, incluyendo 11 atletas en activo (edad media 34,7 ± 6,1 años). La incidencia de muerte súbita cardiaca en atletas en activo fue de 32,83 casos por 100,000 años-atleta. Las autopsias disponibles mostraron consistentemente cardiomegalia e hipertrofia ventricular. Los culturistas profesionales tenían un mayor riesgo de muerte súbita cardiaca que los amateurs (HR 5,23 [3,58-7,64]).
Los resultados de este estudio deberían alertar a las comunidades del fisicoculturismo y médica sobre la necesidad de mejorar las medidas preventivas y una mayor vigilancia de los patrones de entrenamiento y ganancia de masa muscular mediante anabolizantes. La mortalidad no es despreciable aunque la causa no siempre pudo demostrarse como cardiaca.
Comentario
Este estudio es pionero en analizar, de forma cuantitativa, la mortalidad general y por causas específicas de atletas de fisioculturismo. La identificación de una incidencia elevada de muerte súbita de origen cardiaco, especialmente entre atletas profesionales, constituye una llamada de atención sobre esta población de deportistas. Además, dada la expansión en la población general del fisioculturismo, puede ayudar a establecer una estrategia preventiva sobre un amplio sector de la población.
Además de las muertes de causa cardiaca, el estudio destaca también como causa de muerte no despreciable el suicidio, el homicidio y por drogas de abuso. Analiza por ello factores de riesgo que van más allá de lo cardiovascular, proponiendo estrategias de prevención, como cribados previos a la participación, controles antidopaje más estrictos y educación sobre salud mental y dopaje.
Sin embargo, hay que tener en cuenta la metodología utilizada. Los datos se obtienen de búsquedas en dos grandes bases de datos disponibles en la red, lo que puede inducir sesgos de selección y subregistro, especialmente en atletas menos conocidos o de regiones con poca cobertura mediática, y por lo tanto no es tan precisa como un registro médico o forense oficial. Esto puede subestimar o malinterpretar algunas muertes. La escasez de datos de autopsias (sólo en el 10% de los casos), reduce la capacidad para establecer causas de muerte con certeza. También se limita a atletas masculinos de la IFBB, por lo que no se pueden generalizar los resultados a mujeres culturistas ni a deportistas de otras federaciones o niveles no competitivos.
Pero, a pesar de sus limitaciones, el estudio aporta datos valiosos para una mejor comprensión del impacto fisiológico y psicológico del culturismo competitivo. Destaca la necesidad de una regulación más estricta y de una colaboración entre la comunidad deportiva y las autoridades médicas. Su aplicabilidad es directa: las federaciones pueden adoptar sus recomendaciones para mejorar la seguridad de los atletas. De hecho, los autores hacen especial hincapié en que su objetivo no es demonizar el culturismo sino promover un enfoque más seguro y saludable de esta práctica. Los resultados de este trabajo pueden ser un punto de partida para cambios estructurales en la gestión de la salud de los atletas en cualquier disciplina, tanto profesionales como aficionados y contribuir al debate sobre deporte, imagen corporal y salud pública en general.
Referencia
Mortality in male bodybuilding athletes
- Marco Vecchiato, Andrea Ermolao, Marco Da Col1, Andrea Aghi, Giampaolo Berton, Stefano Palermi, Francesca Battista, Sandro Savino, Jonathan Drezner, Alessandro Zorzi , Josef Niebauer y Daniel Neunhaeuserer.
- Eur Heart J. 2025 May 20:ehaf285.