Los antiarrítmicos son fármacos comúnmente empleados en la parada cardiaca (PC) refractaria por fibrilación ventricular (FV) o taquicardia ventricular sin pulso (TVSP), definida por la persistencia de FV/TVSP tras una o más desfibrilaciones. Sin embargo, hasta el momento no se ha podido demostrar claramente si dichos fármacos mejoran el pronóstico de los pacientes con PC.
Esta reciente actualización de la guía de soporte vital avanzado y cuidados cardiológicos agudos de la American Heart Association (AHA) recoge la evidencia científica más reciente y las últimas recomendaciones sobre el uso de antiarrítmicos en el soporte vital avanzado.
En el contexto de la PC por FV/TVSP sin respuesta a desfibrilación, los autores recomiendan el empleo de amiodarona o lidocaína (clase IIb, nivel de evidencia B-R) sobre todo en caso de PC presenciada, para la cual el tiempo desde el inicio de la PC a la administración del fármaco suele ser menor.
Al igual que en la guía de 2010, los autores no recomiendan el uso rutinario de magnesio en PC (clase III, nivel de evidencia C-LD). En el contexto de la PC por torsades de pointes el magnesio sí debe ser considerado (clase IIb, nivel de recomendación C-LD).
En la primera hora tras la salida de una PC por FV/TVSP, los autores no recomiendan el empleo sistemático de antiarrítmicos como profilaxis de nuevos eventos puesto que no existe en el momento actual evidencia que apoye su uso. Sin embargo, la lidocaína sí se recomienda en casos de transporte prolongado (clase IIb, nivel de evidencia C-LD).
Tal y como recoge la guía de 2010 de la AHA de resucitación cardiopulmonar, únicamente el masaje cardiaco y las desfibrilaciones han demostrado incrementar la supervivencia en PC por FV/TVS, no así los fármacos antiarrítmicos. La presente actualización incluye como novedad el empleo de amiodarona y lidocaína con el mismo grado de recomendación en la PC refractaria por FV/TVSP, mientras que la guía previa recomendaba como primera línea el empleo de amiodarona. Dado que ningún fármaco antiarrítmico ha demostrado todavía mejorar la supervivencia a largo plazo o la supervivencia con buen pronóstico neurológico, estas recomendaciones de tratamiento se basan fundamentalmente en un discreto incremento de supervivencia a corto plazo objetivado en algunos estudios.
En dos ensayos clínicos aleatorizados en PC extrahospitalaria por FV/TVSP refractaria (ARREST y ALIVE) la administración de amiodarona incrementó la supervivencia desde el ingreso. Un estudio aleatorizado en FV/TVSP refractaria (ROC-ALPS) comparó lidocaína, amiodarona y placebo mostrando mayor tasa de recuperación de circulación espontánea en pacientes tratados con lidocaína y mayor supervivencia desde el ingreso hospitalario tanto para lidocaína como para amiodarona. Asimismo, un subanálisis en PC presenciada objetivó un incremento significativo de la supervivencia en pacientes tratados con amiodarona y lidocaína frente a placebo.
Por otra parte, la secuencia óptima de intervenciones en la PC por FV/TVSP, incluyendo la administración de vasopresores o antiarrítmicos, y el momento idóneo para su administración en relación con las desfibrilaciones, es hasta el momento una incógnita. Por este motivo, la secuencia de intervenciones así como los tiempos recomendados en los algoritmos de PC están basados en opiniones de expertos y niveles de recomendación.
A modo de conclusión, podemos decir que en base a la evidencia actual, se recomienda el tratamiento de la PC refractaria por FV/TVS con amiodarona y lidocaína, ambas en primera línea, aunque se precisan estudios que determinen la secuencia óptima de las intervenciones en relación con la desfibrilación.
Referencia
- Ashish R. Panchal, Katherine M. Berg, Peter J. Kudenchuk, Marina Del Rios, Karen G. Hirsch, Mark S. Link, Michael C. Kurz, Paul S. Chan, José G. Cabañas, Peter T. Morley, Mary Fran Hazinski, Michael W. Donnino
- Circulation 2018;138:e740–e749.