¿De qué se trata?
Los enfermos con insuficiencia renal y SCA-SEST son enfermos de muy alto riesgo. Las guías de práctica clínica recomiendan una estrategia invasiva precoz en los pacientes con riesgo elevado. Sin embargo, todos los estudios en los que se han basado estas recomendaciones han excluido a los pacientes con insuficiencia renal.